sábado, marzo 12, 2011

Luis Fabiano, un nueve de diez

Andar cansino y de espíritu remolón, de alegría esquiva y samba ausente, a veces indolente hasta el desespero, otras irritante hasta la indiferencia, de mente aturdida cuando la pausa en el tiempo le era ajena, un pie aquí y otro en cualquier parte, sátira del entendimiento.



Sólo una idea fija, el gol, pero qué buena idea. Si quería estaba y, cuando estaba, fantaseaba con la realidad del balompié y sacaba a pasear su atípico "futebol canarinho", de nueve de Brasil de nuevo estilo, tan distinto que es el diez su insignia distintiva, tan cierto que su rúbrica es O'Fabuloso.

De hastíos hasta el improperio y el escarnio, de goles ansiados durante décadas que arrancaron lágrimas de tanta espera, evocaciones de los que no pudieron más que sentirlo desde el tercer anillo y que nunca intuyeron que D10S deambulase por Nervión, ¿o fueron ellos los que hicieron de cicerones y lazarillos?

Gracias por lo disfrutado, de otros, con corbata y pelo escaso, ni me acuerdo.